Como seguros de vida aplicados a hipotecas se entienden cuando en un seguro de vida decidimos que el capital asegurado o indemnización a percibir en caso de fallecimiento o invalidez del asegurado se destine a pagar el capital pendiente de un hipoteca.
Para ello, tan solo tenemos que indicar a la compañía de seguros donde tenemos hecho el seguro de vida los datos de la hipoteca (Banco, nº de prestamos, capital pendiente, duración de la hipoteca o vencimiento, etc). La compañía recogerá en la póliza de seguro de vida un clausula de Beneficiario a favor de la Entidad Financiera (Banco o Caja) en la que se establecerá que el capital asegurado servirá para amortizar el capital pendiente de la hipoteca y el sobrante quedará para los beneficiarios del asegurado (cónyuge, hijos o herederos legales). Cualquier seguro de vida con capital suficiente vale para aplicarlo a la hipoteca. Normalmente el banco o caja te ofrecerá un seguro de vida pero puedes encontrarlo mucho mas barato